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viernes, 4 de mayo de 2012

AUTORRETRATO LECTOR: LECTURAS, PADRES Y AMISTAD

LECTURAS, PADRES Y AMISTAD



Con esta “cartilla”, así la denominábamos por aquel entonces, aprendí a leer. En aquel momento empezó todo. La descubrí, no hace mucho, por casa de mi madre y es uno de mis recuerdos más nítidos de infancia. En ese recuerdo aparezco aproximándome a la mesa de la “seño” aguardando en una fila hasta que me tocara el turno de leer. Ansiosa por hacerlo bien y que ella escribiera la fecha del día siguiente en la correspondiente hoja. Esa cartilla y posteriormente los libros de lectura me acompañaban allá donde fuera, de tal modo que aún hoy, podría reproducir alguna de aquellas lecturas casi de memoria. Recuerdo una, curiosamente dedicada al hundimiento de “El Titanic” que me impactó. Un día mi padre, persona sin casi estudios pero interesada por las palabras, cuanto más extrañas mejor, me regaló un enorme diccionario que conservo titulado, “Mi primer Sopena” y así logró contagiarme esa pasión por la palabra.
Ya en 7º de EGB descubrí a Bécquer y con él, la poesía que supuso para mí todo un hallazgo y unas inmensas ganas de emularlo. Mi despegue lector se originó en el instituto, no tanto por las lecturas obligadas como por aquellas que nos recomendábamos los amigos. La Realidad y el Deseo de Cernuda andaba de mano en mano, Lorca, casi enterito, reafirmado por las magníficas representaciones de sus obras a las que pude asistir por aquel entonces. Fascinada también por los cuentos de Cortázar o Borges. A una amiga le regalaron Un mundo para Julius de Bryce Echenique, que también corrió como la pólvora entre todos nosostros. Todo esto aderezado con mayor o menor éxito por todos los clásicos que tocó leer. Ya en la facultad apareció La Regenta, Cien años de Soledad, Pedro Páramo, también El Libro de buen amor, La Celestina y El Lazarillo, ahora disfrutados de verdad, como tantos otros. Y con todo la certeza y unas inmensas ganas de hacer disfrutar a los alumnos de esta magia.

                   Mª José Chordá Valls

2 comentarios:

  1. Mencionas las cartillas y me vienen a la memoria los libros de historia sagrada y catecismo de la época. Curiosamente, muchas de mis primeras lecturas eran las de David y Goliat, Sansón, etc.
    Gracias por el recuerdo.

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  2. ¡Genial! Nos uniremos a la propuesta... Los chicos de secundaria de nuestro colegio Pedro Poveda también participaremos en la lectura continuada de El Quijote en la Plaza de Santa María de Jaén, el próximo 23 de abril...
    Salu2

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